El artículo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) destaca la urgente necesidad de transformar los sistemas alimentarios globales para hacerlos más resilientes y equitativos. Señala que la combinación de la crisis climática y los conflictos actuales está afectando negativamente la agricultura, esencial para la subsistencia humana. Fenómenos como sequías, inundaciones y fluctuaciones de temperatura están perjudicando la producción de alimentos, lo que, junto con conflictos en regiones como Ucrania y Gaza, agrava la inseguridad alimentaria. En 2022, 258 millones de personas enfrentaron una grave escasez de alimentos. El PNUD propone un enfoque sistémico para reformar los sistemas alimentarios, enfatizando cuatro áreas clave.
Fortalecer la gobernanza: Implementar reformas que promuevan una gestión efectiva de los sistemas alimentarios, como las adoptadas recientemente en Ecuador.
Abordar factores no sostenibles: Enfrentar desafíos como la pobreza, problemas de salud, desigualdad de género y degradación ambiental que afectan la sostenibilidad de los sistemas alimentarios.
Construir cadenas de valor justas: Promover prácticas que aseguren equidad y sostenibilidad en todas las etapas de la cadena de suministro de alimentos.
Financiar prácticas sostenibles: Invertir en iniciativas que promuevan la sostenibilidad y resiliencia de los sistemas alimentarios.
El artículo concluye enfatizando la importancia de la colaboración y la acción inmediata para garantizar un futuro alimentario equitativo y sostenible para todos.
Fuente: https://www.undp.org/es/blog/un-llamado-la-accion-por-sistemas-globales-mas-resilientes-y-equitativos
